Casa-Museo Casares Quiroga

SUEÑOS EN COLOR, POR ANTÓN LUACES

La Opinión, 27 de julio de 2010

Un histórico edificio -la casa-museo Casares Quiroga- acoge hasta el próximo 1 de agosto la obra de la pintora coruñesa Anxela Pérez Meilán, casi una veintena de óleos y acrílicos en los que la textura de la materia se refuerza con papel impreso y trozos de arpillera utilizados por la artista como medio que permite romper determinados academicismos.

En la obra de Pérez Meilán se percibe inconformismo dentro de su línea creativa. Teniendo en cuenta sus trabajos anteriores, la autora remarca ciertos sentimientos similares a los que, un día, llevaron a Agustín Ibarrola, a recrear en colores diferentes la belleza de los árboles del bosque de Oma, y que ella traslada a su mundo particular en cuadros como "Bidueiros" o "Cecebre", donde el árbol es signo de la vitalidad de la tierra misma. Juega favorablemente con la perspectiva -algo muy evidenciado en sus trabajos anteriores- como hace en "Pobo vermello" y deja en el aire la concepción ensoñadora con "Fadas e trasnos".

Hace autoprospección en "Casas brancas" y reflexiona en torno al por qué andaluz de la Alpujarra. Hay un no se qué de cine de Hitchcock cuando experimenta sobre la llegada de los pájaros y expresa su liberalismo coruñés en las galerías de la Marina, una crónica en azul y cristal que encaja a la perfección con el ser mismo de las populares vidrieras de su ciudad. El Sáhara más crudo y profundo se retrata en "Ceo de papel" y "Cruzando o deserto", denuncia silenciosa y dura con un tratamiento que atrae por la sencillez de la expresión lograda.

Las flores y los pájaros se visten de papel en uno de los collage de Anxela y el "experimento" da sus frutos, como los da "Carnac" en su mixtura. Pone nostalgia en la mirada al recordar un mundo verde no tan lejano y convierte en romería la costa de Muxía, con personajes que no buscan autor pero que, necesariamente, han de estar ahí, como buscándose a sí mismos a la luz de un farol de gas.

Hay sueños de nubes en el mar del cielo en "A noite" y "Árbores no río" reflejan lo abstracto para reivindicar una forma de expresar en la pintura la evolución constante de una pintora gallega que ya dio a conocer otras anteriores en exposiciones realizadas en A Coruña, Santiago, Pontevedra, Ourense, Gijón, Madrid, Málaga y, también, en Holanda e Italia, a la espera de hacer realidad su sueño de Varanasi, la antigua ciudad india de Benarés.

Siempre vale la pena la visita a la casa-museo de Casares Quiroga. Pero esta vez, para conocer la obra de una mujer que entiende la plástica como la mejor expresión de su yo, que no es fácil. Anxela Pérez Meilán.